El Horno de Paulo Petit y Walt Clayton en Las Vegas, USA

De nuevo Walt, yankee y cordobés, en una joint venture con Paulo Petit, peruano en Las Vegas, en la construcción de un singular horno sin remediar en gastos...

Saludos de Las Vegas! Y te cuento que un señor peruano, Paulo Petit, vio las fotos del horno que hice con mi amigo argentino Ruben Nervegna y se entusiasmó tanto que ahora estamos construyendo uno en su casa", Walt.

 

PAULO PETIT’S HORNO DE CAMPO

Paulo Petit – a Peruvian cement wizard and designer extraordinaire of artisan kitchen counters and sinks living in Las Vegas – fell in love recently at a friend’s house.  But it wasn’t a woman he fell in love with – it was the homemade pizza. Each guest assembled their own from fresh ingredients, then baked it in a fabulous $25,000 wood-fired oven.

Paulo was hooked. But he wasn’t about to pay a Vegas fortune for his own personal oven. So he put out a call for anyone who knew about building pizza ovens. Through friends on Facebook he tracked me down, because they knew I had built one with my Argentine buddy, Ruben Nervegna, whose horno de campo is featured here on Pasqualino’s website.

Paulo invited me to one of his dinners for tango aficionados – he’s a gourmet cook too – and asked me to bring my horno plans. I showed him everything – photos, design, materials list -- and his enthusiasm was immediate and unstoppable. He had to have an horno... fast! He also proposed that we make them for sale, and split the profits 50-50.

But Paulo had never built an oven. He didn’t know the effort and techniques involved. I insisted that he first build one for himself so he’d know the reality of horno-building.  And the materials and costs.

Paulo wasted no time. Within a week he laid a cement base, and together we worked out a design for the huge oven he wanted. Construction went very fast – he was hungry for wood-fired pizza! We worked on weekends and during the week. Base, oven floor, dome, chimney, outer stucco coating. In just five weeks it is almost finished. Our first test-fire will be this week. Our first trial pizzas will be Sunday, May 15 – the Big Day!

We are delighted with the design and shape of what I call La Tumba de PauloPaulo’s Tomb, because it’s big enough to fit him inside. We are also extremely fortunate to have Pasqualino, with his passion and expertise for hornos de campo, as a distant consultant half a world away in Argentina. Very firmly, Pasqualino absolutely insisted that our chimney be much larger and taller. It also had to be positioned just inside the door, right before the oven dome.

Luckily, we listened to Pasqualino and did exactly as he demanded, to make no stupid mistakes. Soon we will see how it all works when we light the first fire.

Gourmet pizza soon. We can hardly wait!

Walt “Stryke” Clayton

El Hornero de Vegas


 

Los comienzos:

 

Dos semanas después:

Y durante la Semana Santa del 2011:

Nótese la atenta supervisión de Sparky, The Fire Dog, capataz de la obra.

 

La semana siguiente a pleno sol:

Y sin descanso durante la semana:

A labor of love: final and fire.

 

Don Pasqualino: (...)

Antes que nada te cuento que yo no tuve nada que ver con la selección del color pa' el horno. Si parece estar vestido cómo una mujer de la noche, bueno... echá la culpa al peruano don Paulo.
Ayer prendimos fuego por primera vez y - gracias a ti - funcionó perfectamente bien la chimenea. ¡Menos mal que te escuchamos!
El domingo vamos a hacer las primeras pizzas y por supuesto voy a mandar fotos. Me gustaría mandarte una pizza por email pero no tengo el software pa' eso ¡todavía!
Mil gracias por todo tu ayuda en esta obra de pasión! O, cómo se dice en inglés... "labor of love."
Saludos con brasas calientes y sin humo,
El hornero yanki Walt.

 

 

   

Hola Pasqualino,

Anoche hicimos las primeras pizzas con el nuevo horno de Paulo. Había más de 25 invitados y cada persona armó su propia pizza. El horno funcionó rebién, sin ningún problema, e hicimos unas 40 pizzas con una gran variedad de ingredientes: quesos, mejillones, aceitunas. anchoas, camarones, tomates, y hasta algunas frutas. También hicimos una pequeña tanda de empanadas criollas argentinas. Con cerveza y buen tinto se divirtieron todos. Fue un gran éxito, y ya tenemos programa para el próximo pizza party en dos semanas.

And in English...

Last night we had our first serious pizza fest with Paulo's new oven. More than 25 guests each assembled their own, and the oven worked flawlessly. We made over 40 pizzas from a huge variety of ingredients -- assorted cheeses, baby clams, olives, anchovies, shrimp, tomatoes, pepperoni, and even some fruit. We also made a small batch of Argentine empanadas. Iced beer and fine red wines helped wash it all down and everyone had a fabulous -- and educational! -- time. Our next pizza bash is already scheduled in two weeks!

Hasta siempre, Walt y Paulo.

 

 


El Horno de Barro d Facundo Farias, Villa Domínico, Avellaneda, Argentina

 

 

Comentario: (un poco largo, pero va a servir mucho a los principiantes).

¡Hola! Soy Facundo de Villa Dominico, Avellaneda, una localidad al sur de la Capital. Tengo 21 años. Estoy estudiando para ser Maquinista Naval, vendría a ser como un mecánico de barcos.

Le escribo para agradecerle, y darle un millón de gracias por todo el aporte de su página, y de la gente, que me han servido para poder construir mi Querido Horno.

Le he escrito anteriormente para preguntarle cómo podía hacer para comunicarme con usted y como hacer que mi comentario aparezca en su página. Y considero que yo, he demorado un montón al devolverle su respuesta. Pero no fue porque no he tenido tiempo, sino porque quería mandarles unas fotos, en donde la comida que haya hecho me haya salido, por lo menos, rica y comible. Y esto ocurrió el jueves 23 de diciembre de 2010. Cuando nos juntamos con un grupo de amigos a comer unas pizzas, que por supuesto fueron hechas, en mi Hornito de “barro”, lo pongo entre comillas porque no es de barro, en realidad. (Más adelante le voy a contar de que esta hecho, y cómo fue su construcción)

Le comento a usted y a los lectores de su página, que he tardado aproximadamente TRES AÑOS en terminarlo. Esto sucedió porque, me he frustrado cuando se derrumbo la boca del horno. Gracias a ese hecho, he estado parado alrededor de dos años y medio!! Sin tocar mi construcción.  En todo ese tiempo, me he bancado la cargada de todos mi amigo, ya que cuando venían para mi cumpleaños, para las fiestas, o por otro motivos, me decían: “y para cuando el horno?”, “me parece que nunca vamos a comer unas pizzas en ese horno”, “no lo terminas más”, entre otra frases que ahora no recuerdo, ya que eso pasó hace mucho tiempo. Pero yo en el fondo sabía que  iba a retomar su construcción, e iba a terminarlo de una vez, por eso no me molestaban sus comentarios. Además de todas esas cargadas, durante todo ese tiempo, me pasaron varias cosas: me recibí de Técnico Mecánico, me puse de novio, empecé otra carrera (la que estudio actualmente), me pelé la cabeza, conocí  gente nueva, entre otras cosas.

El derrumbe de la boca del horno, creo que se dio, por el barro. Aunque no le hecho la culpa del todo, porque antes hacían construcciones de barro y resistían, de hecho la mayoría de los hornos de la pagina son de barro y funcionan “al pelo”. Pero bueno, yo no pude pegar los ladrillos con el barro. Así que use otro material: ARCILLA REFRACTARIA. Así que mi hornito no es 100% salvaje. Es más bien un hornito… ¡bastante cheto! Pero fue la única manera de poder hacer que resista y no se me venga abajo. Aclaro, también, que la primera boca, es decir la boca que hice con barro, el soporte que utilice para sostener los ladrillos, se lo saque. Ahí fue cuando colisionó todo. (¡Garrón!) Para que eso no me vuelva a suceder, decidí construir un soporte con una planchuela de acero de aprox. 3cm de ancho y 0.4cm de espesor. Esa chapa todavía sigue puesta, sosteniendo los ladrillos que forman la boca.

Al terminarlo he tratado de hacer unas carnes y unas pizzas pero me salieron crudas y las tuve que terminarlas en el horno de la cocina. No sabía cómo hacer para que se me cocinara lo que ponía.  Hasta que vino mi tío Oscar, de Santiago del Estero, un día de visitas, y me enseño cómo funcionaba. ¡Mil gracias Oscar!

Ese día yo amasé unas pizzas, y él  prendió el fuego (me hubiese gustado que los roles fueran al revés, ya que a mí me gusta mucho más prender el fuego que preparar la comida). Me dijo que el horno se tiene que calentar bien bien, es decir, ponerle bastante leña primero hasta que en el interior quede blanco,(techo, paredes, todo blanco, nada de negro).  El exterior tiene que estar caliente. En ese momento quiere decir que el Horno está lo suficientemente caliente. Luego de eso hay que dejar asentar las brasas, es decir dejarlo un rato hasta que las maderas se hagan cenizas. Una vez sucedido eso, se retira todas las brasas, o cenizas y se lo limpia bien (hasta este paso la chimenea y la boca se encuentran destapadas) Luego de que el horno esté bien limpio… está listo para cocinar. Para cocinar se coloca la puerta y se tapa la tronera (chimenea) Si está muy caliente se destapa la tronera o la boca.

Voy a contarle un poquito de la construcción ahora. Comencé haciendo una losa, que se apoya en tres perecitas. Para mi es: bruta losa!!!. La forma circular se la di con una madera en forma de cruz.

Una ves hecho el contorno, comencé a rellenarlo con ladrillos, utilizando barro.

Sobre el contorno, puse una hilera de ladrillos, pero ésta vez, pegados con barro. No con cemento.

Esta vez, en vez, de rellenarlo con ladrillos, le puse el vidrio, la sal gruesa, y la tierra.

Sobre este colchón coloque ladrillos refractarios, que pasarían a formar el verdadero piso del horno. Los pegué con la arcilla refractaria.

Lugo comencé hacer la boca, cuya altura es de 60 cm de base y 36 cm de alta. Primero coloqué dos ladrillos sobre el piso, y sobre estos puse el soporte que sostendrían luego a la boca, y sobre este soporte fui pegando los ladrillos.

Una vez hecha la boca del horno continué con la cúpula. Para esto coloque un clavo el centro del horno y le ate un hilo. Este hilo sería el encargado de darle la forma esférica al horno. Al  hilo le hice un nudo, a los 60cm (radio exterior del horno)  del clavo, para saber que los ladrillos que colocaba no se pasaran de ahí. A medida que subían las hiladas de las mitades de los ladrillos más se iba cerrando gracias al hilo. Ya que a más hiladas el nudo se iba acercando al centro dándome la inclinación de las mitades de los ladrillos. El hilo tiene que tocar en toda la superficie del ladrillo.

En la foto de arriba se puede ver la cúpula casi terminada y en el frente un ladrillo con un agujero, cuyo fin es sostener el termómetro. El termómetro tiene una pequeña rosca, la cual enrosque en un pequeño buje de bronce, cuyo fin es apoyarse sobre el agujero del ladrillo.

Les recomiendo que el termómetro no lo pongan encima de la boca porque cuando hacen el fuego se quema. Ubíquenlo en un costado. Y otra recomendación es que, el termómetro indique grandes temperaturas, para que la aguja no llegue al fondo de la escala, y no deteriore el instrumento de medición. Esto se lo digo, porque el termómetro que  le puse indica hasta 600 ºC y cuando hice el fuego, la aguja del termómetro llego al fondo, provocándome, creo yo, el falseo del resorte interior del instrumento con lo cual en un día de 25 ºC aproximadamente, me marca 100 ºC. Por ende, usen termómetros que indiquen grandes temperaturas.

La tronera o chimenea, como quieran llamarle, la ubique a una 3/4 parte de la altura del horno.

Luego de poner la chimenea lo único que me quedo por hacer es seguir haciendo las filas de las mitades de los ladrillos hasta terminarlo.

Luego revoqué la tronera, pero no lo recomiendo, porque después se me derrumbó, ya que la chimenea se dilato (creo que fue eso) y provocó la rajadura del material, seguido del derrumbe del revoque de la tronera.

La puerta la hice con un pedazo de chapa de aproximadamente 0.4 cm. La corte con una amoladora con la forma como se ve en la foto. Y le coloqué una manija de madera, torneada en el lugar donde estudio. 

Espero que les sirva la información y las fotos como me sirvieron a mí las de los demás.

En otro mail le adjunto algunas fotos.

 

El Horno de la familia Granados-Camacho,

Denver, Colorado, USA

 

Comentario:

Estimado Pasqualino, gracias a su página he construido mi horno en Denver Co Usa.

Primeramente mire todos los hornos en su página ya construidos y con sus recomendaciones ya tengo mi horno. Lo construí de ladrillos rojos y para pegar, pues me fue difícil encontrar barro por acá, utilicé un cemento que se llama Firerock Mortar, especial para resistir lo caliente ,tal vez si encuentro barro mas adelante le pondré por fuera.

Ya terminado el horno lo deje secar 15 días, lo encendí y funciona muy bien. La chimenea se la puse enfrente y sale muy bien el humo. 

Gracias hasta pronto.

 

 

 

 

Atrás

Envíe un mensaje a pasqualinonet@gmail.com con preguntas o comentarios sobre este sitio Web.
Copyright © 2023 La Cocina de Pasqualino Marchese
Última modificación: 12 de diciembre de 2022